El concurso de ensayos de Lingoblog, donde estudiantes de secundaria podían enviar sus ensayos sobre el idioma en danés o en otros idiomas, sobre el danés u otros idiomas, ha dado lugar a muchos buenos ensayos. Este ensayo ganó la tercera categoría: “ensayo en un idioma extranjero”. Lingoblog agradece al Nacional Center for Fremmedsprog – Vest por su apoyo y a todos los miembros del jurado por sus esfuerzos. El jurado y los jueces quedaron impresionados por el nivel, y no ha sido fácil elegir un ganador. ¡Felicitaciones Sofía Plazas! Ha escrito su ensayo en español, el cual publicamos aquí en una traducción danesa, y luego en el español original.
Ej jurado escribió:
Ensayo bien escrito sobre los desafíos de un hispanohablante al aprender danés. Capaz de explicar aspectos destacados del idioma danés de una manera divertida y personal, así como hacer observaciones relevantes sobre el aprendizaje de un idioma extranjero. Fue un placer leerlo!
En el año pasado, cuando decidí venir de intercambio a un lugar lejano, pequeño y diferente, (sí, estoy hablando de Dinamarca); nunca paso por mi cabeza el problema de la comunicación y del idioma. Cuando les decía a mis amigos que me iba a Dinamarca, quedaban confundidos, pues no es común viajar a otro continente y menos a un país no tan conocido por los colombianos. Recuerdo que me repetían, “Sofía, ¿sabes algo de danés? Y yo muy tranquilamente y con seguridad decía: “Se cómo decir, Hoy comí una manzana”, (Todo esto gracias a la app Duolingo, la cual solo usé por un mes). La verdad siempre pensé que con el inglés me bastaría, ya que la mayoría de la población domina el inglés y que el danés vendría como por obra de gracia, pero cuando llegue me di cuenta que no era para nada lo que me imaginaba. El danés, es un idioma muy diferente comparado al español, su forma de pronunciar, su gramática, hasta su abecedario es distinto. Todo esto ha hecho que me den dolores de cabeza al pensar que todo lo que me esperaba por delante sucedería a través del danés, aunque también ha despertado mi curiosidad acerca de la forma de comunicación de las personas, no solo lo digo por su forma hablar, sino cómo se escriben por chat, llamada, sus expresiones. Todo esto sigue siendo nuevo para mí, aunque ya llevé 8 meses viviendo esta experiencia, me sigue sorprendiendo.
Primero hablemos de la estructura; en español se forman las palabras a raíz del género masculino, o femenino, para poder escribir correctamente en español se debe diferenciar estas reglas: cuando se refiere a masculino, en la mayoría de los casos la palabra termina en la vocal “o” y cuando se refiere a femenino en la mayoría de los casos la palabra termina en la vocal “a”. Esa es la manera más simple de explicar la estructura del español, evidentemente tiene más reglas, pero esta vez solo vamos a hablar de lo superficial. En cambio, en danés no existe el género en las palabras, sólo se utiliza el “Neutrum y Utrum”, para el neutrum se utiliza el “et” y para el Utrum se utiliza el “en”. Se podría pensar que sería más fácil aprender el danés ya que no tienes identificar si es femenino o masculino, sólo saber cuando utilizar “en” o “et”, pero ahí es cuando te equivocas. Cuando estaba en mis primeras clases de danés, todo era fácil y tenía sentido, pero en cada clase se volvía más difícil, aparecían nuevas reglas y mi cerebro se confundía cada vez más sobre la forma en la que se usan las palabras, bueno supongo que sería igual para ellos si tratan aprender español.
Ahora bien, tengo que decir que sería mucho más fácil para un danés aprender a hablar español. El español se lee igual como se escribe en cambio el danés no, este tiene ciertas específicas pronunciaciones que tienes que aprender, como las letras silenciosas, o sobre las letras que cuando se juntan hacen que se pronuncien diferente, o las letras que para mí son nuevas, (æ, ø, å), que por cierto todavía no puedo pronunciar la letra ø, y es irónico porque en la ciudad en la que vivo empieza con esta letra. Esto ha hecho que pase ciertas situaciones incómodas ya que normalmente siempre me preguntan en donde vivo, y cuando respondo según yo, en mi mente lo estoy diciendo de la manera correcta pero apenas lo digo la gente me mira con una cara de ¿Qué?, y yo lo repito unas 3 veces más, hasta que alguien entiende y lo repite, y ahí todos entienden lo que yo estaba tratando de decir y siempre tienen la misma reacción, el: “Ahhhhhhhhhh, eso tratabas de decir”, a veces encuentro frustrante estas situaciones pero lo bueno es que aprendo sobre estas. Otra cosa que ya no me pasa tanto como me pasaba en el principio, es que todos, absolutamente todos me ponían a decir esta frase: “Rødgrød med fløde”, esta frase es un famoso postre de fresa que hay en Dinamarca, pero solo me lo hacían decir porque es muy difícil de pronunciar y es casi como un trabalenguas.
También se me dificulta diferenciar las letras o, ø, å. Para mí todas suenan igual y cuando tratan de marcar la diferencia yo solo sigo escuchando la o, se puede decir que mi mayor dificultad al aprender el danés es la pronunciación, siempre he pensado que ellos hablan desde la garganta mientras tanto los hispanohablantes hablamos con la lengua, tal vez es por esa razón que para ellos es difícil pronunciar la “r” en español y para mí es difícil pronunciar la “r” en danés.
Y hablando de la gramática y la pronunciación, es interesante hablar sobre sus expresiones, su forma de escribir, sus dialectos. Los daneses tienen ciertas expresiones que lo hacen únicos, unas de estas son, cuando están cansados o está haciendo mucho calor, ellos dicen como “puhaa” pero de cierto modo que solo los daneses saben decirlo. También cuando alguien hizo algo súper bien, dicen “Sådan”, lo hacen con entusiasmo y les sale del corazón. Otra expresión que es muy común, que para muchos es una falta de respeto ya que es una grosería, es el “For helvede” o “For satan”, es una forma de decir maldita sea, lo dicen cuando algo no les sale como ellos querían, o cuando se sorprenden, se puede usar de varias maneras y varios contextos. He escuchado a varios compañeros de clase decir que los daneses son muy groseros, que se la pasan diciendo “fuck” o lo que acabe de mencionar unas líneas atrás, a mi parecer como colombiana, siento que no son para nada groseros, en cambio, son muy cordiales y decentes, si lo ponemos en comparación con mi país, claro, nosotros tenemos varias palabras no tan bonitas, y como parte de nuestra cultura la mayoría de los jóvenes usan malas palabras en su vocabulario diario. Una cosa graciosa que me paso con una expresión, es cuando uno estornuda ellos responden “Prosit “, cuando me dijeron eso por primera vez me quede un poco confundida y con risa porque suena como si estuvieran diciendo “pussy”, y eso en ingles significa otra cosa que no tienen nada que ver con un estornudo ya ustedes sabrán que significa.
Por último, algo que encontré muy tierno a la manera de escribir un mensaje de texto, cabe aclarar que solo pasa con personas adultas en la mayoría de los casos, es que al final de la oración ponen “saludos” y el nombre de la persona, me pareció interesante porque es como para recalcar que ellos escribieron dicho mensaje, aunque yo sepa que son ellos porque los tengo guardados en mí celular.
Para terminar, cualquier lengua tiene sus dificultades y sus técnicas que solo con la práctica y el tiempo se pueden aprender. Requieren un esfuerzo grande para manejarlo como lo hacen los nativos. Seguro si no se le pone empeño va a ser demorado y tedioso, además que puede ser frustrante al momento de no poder entablar un tema de conversación con otras personas.
Sentirse fuera del ámbito social al no poder comunicarse es una de las sensaciones más desagradables a mi parecer. Entonces hay que ser perseverante y seguir sin importar si estás cometiendo errores, es más, de estos mismos es de donde uno aprende mejor.
Poniendo a un lado las limitaciones de lo que significa aprender un nuevo idioma, también hay que ver las ventajas y las partes divertidas. Para mí fue un proceso con muchos altibajos. Lo bueno es que las personas que he tenido cerca me han ayudado y me han dado el ánimo para seguir avanzando en esta experiencia no solo de aprender el idioma sino de conocer mejor la cultura de este país.
Sofia Plazas va a Varde Gymnasium donde es estudiante de intercambio de Bogotá, Colombia. Está en Dinamarca desde hace casi 11 meses y se devuelve a su país el 27 de diciembre. Cuando vuelva va a llegar a estudiar en la universidad, la carrera de psicología. Esta muy agradecida por todo lo que vivió y siempre tendrá Dinamarca en su corazón.
Qué lindo leer esto porque es exactamente lo que a mi me está pasando aprendiendo danés aquí. Yo ya soy mayor, tengo 62 años y me casé con un danés pero vivíamos en Mexico y porque la mamá de mi esposo se hizo mayor nos vinimos aquí a estar con ella y cuidarla y justo estoy muy entusiasmada aprendiendo danés, que si admiro esta cultura, por su riqueza histórica, artística, política y social, ahora aprendiendo la lengua todavía me admiro más…. es toda una aventura navegar por este idioma que muy poco se habla en el mundo y creo que por eso mismo poco se sabe de ellos, al menos yo, no sabía nada, pero estando aquí me maravillo con este pueblo y ahora con su idioma.